Valor, arrojo y... una cabeza mas dura que la rodilla de una cabra es lo que hace falta para bañarse (o por lo menos intentarlo) en aguas completamente heladas. El shock del buen hombre no se si se deberá a la temperatura del agua o a la imposibilidad física de no haberse podido remojar jajaja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario